20 Entrenar las emociones

Así como el cuerpo se entrena, el cerebro, las emociones también. Hoy Richard Davidson intro. Hola, ¿cómo están? Hoy voy a contarles un poco de este libro que encontré de Richard Davidson y Sharon Bigley, que se llama El perfil emocional del cerebro. Vieron que en el capítulo anterior hablamos de reconocer las emociones para trabajarlas, para que nos sirvan en la vida, para que eh nos ayuden y estén a nuestro favor. Bueno, este libro, Davidson es un pionero de la neurociencia. Como les contaba la otra vez, siempre la inteligencia se había relacionado con lo cognitivo, o sea, los las capacidades intelectuales, pero desde hace tiempo se está estudiando muy en profundidad. cómo en el cerebro se pueden ver o se pueden reflejar las emociones que sentimos afuera. Bueno, esto es el perfil emocional del cerebro, que vendría a ser como un estilo emocional que tenemos cada persona diferente que nos hace reaccionar a las diferentes acciones o a las diferentes experiencias de la vida. para intentar explicarlo. Es bastante difícil de explicar, pero no es tan difícil de entender. Nosotros tenemos un perfil emocional único que sería la combinación de seis dimensiones con la que nos enfrentamos a la vida. Entonces, en esas seis dimensiones, cada una de ellas tiene polos. Se puede ser más o menos, digamos, de un de un extremo o del otro. Ahora lo voy a Explicar bien. Por ejemplo, los seis, no, el por ejemplo no va. Las seis dimensiones son resiliencia, actitud, intuición social, autoconciencia, sensibilidad al contexto y atención. Ejemplo, en la resiliencia, ¿qué implica la resiliencia? Es cuánto tiempo se mantiene una persona desanimada después de una situación desfavorable. Entonces, menos tiempo, más tiempo. Ese sería el espectro. Eso con diferentes testúa y da un puntaje. Pasa lo mismo con la actitud, la segunda dimensión, que es una actitud más positiva o menos positiva y en el medio, ¿no? Esto, todo esto se va apuntando de un a 10 con ciertos tests. La intuición social, ¿qué es? Que es entender o no el ánimo de otros. y captar las señales sociales para modificar nuestra nuestra conducta y nuestras emociones. La autoconciencia es cuánto de mi conducta está manejado por mis emociones, pero cuánto yo me doy cuenta de eso. Eh, la quinta, la sensibilidad del contexto es adecuarse justamente al contexto. Es algo intuitivo, pero muchas veces nos sirve para comportarnos adecuadamente según dónde estemos. Y la atención, que es algo curioso que esté, que forme parte de un componente emocional porque siempre se la tomó con como algo cognitivo, pero es interesante porque en realidad ya bastante está comprobada la relación entre la carga emocional y la generación o eh el descarte de memorias, de recuerdos. Está bastante relacionado cómo generamos ciertos recuerdos gracias o a pesar de cierta emoción y al revés también, como nos olvidamos. Bueno, acá la atención está siendo una de esas dimensiones del perfil emocional de una persona y es la capacidad de concentrarse más o menos también en un contexto que puede ser distractorio. Entonces, ¿cuánto de nuestra atención se puede mantener? Bueno, todo esto, o sea, más menos resiliencia, actitud más positiva, menos positiva, entender más menos la intuición, o sea, lo el contexto social, tener más menos autoconciencia, más menos sensibilidad a al contexto y a lo propio también. Y más menos atención nos define un perfil que es distinto al mío. del tuyo y de otros. Con ese perfil se arma y se puede estudiar el comportamiento. Y lo más interesante en realidad de esto es que estamos hablando de comportamientos que se ven reflejados en zonas del cerebro. Y esto trae otra cosa, que si el cerebro se estructuró y se armó esa manera por ciertas cosas que son a veces costumbre. Entonces también si se moldeó de una manera se puede moldear de otra. Por ejemplo, muchas de estas eh dimensiones se reflejan en la corteza prefrontal como la resiliencia, la intuición social. Ciertas zonas de la corteza prefrontal se activan más, por ejemplo, para inhibir la amígdala y eso favorecería recuperarse más rápido de una situación triste o una situación que no nos es favorable. Entonces, el cerebro trabaja, en conjunto, diferentes zonas del cerebro trabajan para generar una emoción y si esa emoción por ciertos estímulos se vuelve a repetir y se repite y se repite, se fortalece. Y acá está lo interesante. Por ejemplo, la ínsula es la que recibe señales del interior del cuerpo. También está la corteza eh somatosensorial. Todo esto procesa las cosas que pasan dentro del cuerpo y eso genera emociones. También tener más o menos autoconciencia se relaciona con esta parte del cerebro. A mí en personalmente me parece Super interesante que se esté estudiando esto porque sirve no solo para refutar la teoría del ya soy así, no voy a cambiar porque eso ya fue refutado por la neuroplasticidad. El cerebro no es solamente lo genético y que ya es como es y no puede cambiar, al contrario, se puede ejercitar, se pueden cambiar actitudes, podemos moldear muchas de nuestras acciones. aprender, ejercitarlas y usarlas a nuestro favor. O sea, resumiendo, tener un perfil es el resultado de patrones, patrones que fuimos creando con el tiempo y con la repetición. Y eso lo podemos ver en las redes neuronales que se arman, o sea, las neuronas que van armando caminitos que llevan a las acciones que hacemos. Está buenísimo. ¿Para qué sirve? Para trabajar en lo que no nos sirve, en esas acciones o en esas emociones que generan frente a cierto estímulo y que nos hacen accionar mucho más dependientes de la emoción de lo que quisiéramos. Ejemplo, el enojo, tocar la bocina cuando nos enoja, el tránsito. La acción tocar la bocina en un embotellamiento que no se va a mover no tiene sentido racional. Es una pura descarga emocional y está bueno saberlo porque Ahí, en ese segundo en que pensamos eso, tenemos la elección porque decimos, "Bueno, sigo tocando bocina, a mí me hace sentir bárbaro, no sumo nada, no mejoro el tránsito, pero sí me estreso, me enojo más, alimento mi enojo, eh si alguien, no sé, me habla, le grito, etcétera, o bueno, pongo música y me pongo a cantar una canción, me pongo a escuchar un podcast, hago algo con ese tiempo que sé que igual no puedo modificar la situación externa que es el embotellamiento. O incluso hasta uno podría decidir, no es que lo vaya a hacer ni es que sea muy racional, pero la decisión del salir del auto y ponerse a caminar está también. No estoy diciendo que esté bien, estoy diciendo que es son todas decisiones y opciones. Hay van a cambiar la realidad probablemente no. No esas, pero sí pueden cambiar como nos sentimos. Me parece este el punto clave de todo el estudio que se está haciendo. ¿Cuánto hay de lo que nosotros podemos hacer para sentirnos más menos bien? También es cierto que frente a un estímulo hay reacciones lógicas, hay cosas que son lógicas en en un sentido de un acontecimiento que nos resulta tristes, nos va a poner tristes y eso está bien. La decisión acá está en el después. ¿Cuánto? ¿Cuánto más? ¿Y qué hacemos? Está bien sentir cada emoción y también está bien conocernos, que esta es la clave y es lo que él dice también. Es clave autoconocerse para saber dónde, cómo, cuándo actuar de forma tal que después nos sintamos bien con nosotros mismos. No hay otra, a ver, no hay otra respuesta. ¿Para qué es todo esto? Para no arrepentirnos de ciertas cosas después, para aprender y cambiar a veces actitudes frente a cosas que ni siquiera sentimos que podamos controlarlas, sino que sí hay una manera de un tiempo en el que podemos decidir no repetir, por ejemplo, patrones familiares. Bueno, mi papá era así, bueno, quizás yo soy una persona independiente y puedo ser diferente y permitirme ser otra persona que quizá incluso me gustaría ser, no otra persona, no lo digo como un completo cambio de personalidad, lo digo como a veces sentimos que admiramos alguna actitud de una persona y quizás no es que se tan fácil llegar a ser así, pero sí podemos tomar alguna acción para acercarnos a algo que nos gustaría hacer. Simplemente es una idea. El cerebro nos ayuda, pero hay que entrenarlo. Ese es el lado B. Como el cuerpo, si quiero, si yo quiero levantar 60 kg hoy y no levanto ni dos, no lo voy a poder hacer hoy. Pero sabiendo que hay un tiempo de entrenamiento, quizás un día Sería factible, puede ser. Será posible, puede ser. No lo sé hasta que no intente y me entrene. Quizás nunca llegaría ni aún con entrenamiento a eso, a 60, pero sí voy a lograr al menos los dos que no logro hoy. Esto estoy hablando de no buscar una perfección, sino una mejoría. Podemos ser mejores que nosotros mismos, no mejor que otro. Esto no es para pararse. Esto es para sentirnos bien con nosotros, buscando una leve mejoría o algo diferente a lo que hacemos siempre y que nos genera una insatisfacción. Quizás es simplemente una herramienta. Lo bueno es que él da herramientas, la terapia cognitivo conductual para la autoconciencia y habla bastante del mindfulness, o sea, la meditación consciente. para ciertas cosas como la atención, la resiliencia, creo que para la resiliencia también, no me acuerdo. Sé que es para la atención y para un par más de las dimensiones para mejorar, porque a veces en ese espectro una de las dimensiones nos da como muy bajita y no nos sirve tanto. Voy de nuevo. Quizás lo que querramos mejorar a veces es una dimensión de este espectro y voy de nuevo. Quizás lo que querramos sea mejorar una de las dimensiones, por ejemplo, tener más atención y podemos hacer meditación. Otro día voy a hablar de la meditación porque me persigue la frase que me la dijeron hace mucho, ¿no? Pero yo no puedo no pensar en nada. Y la meditación no es no pensar en nada, es muy diferente a eso y no hay una sola manera. Es como el entrenamiento. No es lo mismo entrenar para una maratón que entrenar para ser físicoculturista. También hay diferentes tipos de meditación de acuerdo a lo que querramos conseguir. Siempre es buena. Igual da otros consejos como escribir algo positivo, por ejemplo, para la dimensión de la actitud. Si tendemos a ver todo siempre un poco negativo, que es gracioso porque la gente que ve las cosas bastante negativas, en general dice que es realista, pero es negativa, no lo ven, pero positivo no lo no ven mucho las cosas positivas, entonces sí estás inclinado, tenés un lado más desarrollado que el otro, está bueno para convertirse en realista que al final y al cabo la realidad es la que percibimos. Es difícil, aunque haya una realidad que compartimos, hay una realidad que también pasa por nuestro interior. Bueno, ya lo hablamos esto. Entonces, la que sí podemos modificar es nuestra percepción de esa realidad. Entonces, quizás si nos damos cuenta que siempre estamos poniendo un pero o no vimos o nos hacen dar cuenta que no vimos alguna cosa que sí está buena o escuchamos algunas personas que rescatan algo bueno, quizá podemos practicar y si nos parece tonto decir algo positivo de alguien o de algo, entonces es que estamos en un lado negativo. Porque si decir algo, qué lindo tal cosa, nos parece absurdo o tonto o que no debería estar, entonces sí estamos en el lado negativo. Así que él propone eso. A veces se dice, "Ay, los diarios de agradecimiento, pero No está mal agradecer. A veces ser agradecido nos conecta con algunas cosas que se nos escapaban. Bueno, voy a terminar acá. Esas son como ideas que da, pero la verdad es que les recomiendo si quieren eh profundizar en este tema, no tienen que saber de neurología, de eh información acerca del cerebro, pero está interesante para esto. Si tienen como objetivo modificar o mejorar alguna cosa, la La buena noticia es que es posible. Más adelante voy a hablar de algunos otros temas, pero si les interesó podemos volver a este tema con alguna otra teoría. Hoy Davidson mañana veremos. Les mando un abrazo y hasta la próxima.